jueves, 22 de agosto de 2013

LA REFORMA Y EL AJUSTE EN LA UNIVERSIDAD


La reforma en las universidades argentinas ha venido aplicándose con distintos grados de intensidad. Teniendo como caso testigo la situación de la educación universitaria en Chile, podemos decir que ha sido la movilización de trabajadores y estudiantes argentinos a lo largo de las últimas dos décadas uno de los principales frenos al avance del proyecto del Banco Mundial para la educación superior en América Latina.

El caso chileno es extremo, algunas de sus características son: el sistema público es arancelado con altas tasas, existe un avanzado proceso de descentralización en detrimento de la planificación nacional de la oferta educativa; el capital privado juega un rol fundamental en el mantenimiento de las instituciones y los planes de estudio están en plena sintonía con las necesidades del mercado (de esta manera, se crean las bases materiales para liquidar la autonomía universitaria); a la vez que existe un complicado y a la vez aceitado sistema de evaluaciones y promedios (Prueba de Selección Universitaria) que deja una gran cantidad de jóvenes afuera de la carrera que realmente desean estudiar. Esta prueba funciona a nivel nacional y para prepararse los estudiantes deben concurrir a institutos privados.
Los aspectos generales de la educación chilena tienen una relación directa con los que encontramos en las leyes que regulan la educación superior sancionadas a lo largo de toda América Latina.
Es a partir del Consenso de Washington que se intentan instrumentar estos cambios, y la educación superior no ha estado al margen de la situación general del sistema educativo público.
Las desigualdades en los niveles de aplicación obedecen a varios factores.

Como decíamos en un comienzo, en Argentina fueron los procesos de movilización en distintos momentos los que han impedidos a los distintos gobiernos avanzar todo lo que pretendían en esta reforma.
Sin embargo, se ha avanzado en la política privatizadora y mercantilizadota a lo largo de estos años y, fundamentalmente en dos períodos: en la década menemista y en la década kirchnerista.
Esto ha sido posible por la complicidad o la convivencia de las burocracias sindicales docentes y no docentes, así como también de la Federación Universitaria Argentina (conducida desde por el radicalismo agrupados en la Franja Morada, en acuerdo con el peronismo) y, jugando en muchos casos un rol protagónico, las federaciones de carreras o facultades de determinadas disciplinas, controladas por los consejos profesionales de las carreras en cuestión.

Menem comenzó el proceso de privatización con la sanción de la Ley 24.521 de Educación Superior en 1995, la cual aun se encuentra vigente. Esta ley considera la educación superior un servicio y no un derecho, le quita al estado la responsabilidad de su pleno funcionamiento y abre el camino a la privatización, promoviendo la creación de aranceles y de convenios con empresas multinacionales para autofinanciarse. A la vez que crea la Comisión Nacional de Evaluación y Acreditación Universitaria (CONEAU), encargada de evaluar y acreditar los planes de estudio.
La CONEAU, como parte del proceso de privatización de la educación superior, impuso el mismo rumbo que el adoptado por las universidades de Europa1 y EEUU; donde en las carreras de grado se reducen los contenidos y no incorporan los nuevos conocimientos, lo cual implica recurrir a los posgrados. Este organismo modifica los planes de estudio de las carreras de grado, los vacía de contenidos, y coloca esos conocimientos en posgrados arancelados.
Este modelo educativo exige la constante cualificación de los estudiantes para poder acceder a los puestos de trabajo que el mercado laboral impone. El problema radica en que solo una pequeña elite se encuentra en condiciones económicas de obtener dichas especializaciones, debido al alto arancelamiento de estos posgrados.
Un ejemplo claro de recorte es el que se dio en la Facultad de Odontología de la UBA, el estudio de implantes y conductos no forma parte de la carrera de grado sino parte de un posgrado cuyos costos rondan entre los miles pesos.

Daniel Filmus, ex Ministro de Educación y actual senador de Frente para la Victoria asegura en su artículo “La educación en el tercer milenio” que en el futuro habrá una focalización en las carreras universitarias, el título de grado requerirá menos años de estudio pero su función principal será la de habilitar el acceso a un “curso de especialización”.
Con vistas a futuro, Filmus también sostiene que el cambio permanente en la tecnología impedirá a las instituciones educativas formar a estudiantes en el correcto manejo de la tecnología de punta. Por lo que la capacitación será ofrecida desde las propias empresas.
Un ejemplo es el convenio firmado por la Universidad Tecnológica Nacional y la empresa automotriz Volkswagen, el cual apoyo la presidenta Fernández y el Ministro de Educación. La universidad estatal responderá por los costos de la formación de sus profesionales y la empresa alemana participará de la elaboración de los planes de estudio.

De esta forma, la CONEAU achica los títulos de grado, limitándolos a una mínima aplicación práctica, los contenidos tradicionales de muchas de las carreras acreditadas son ofrecidos en postgrados arancelados y las reformas de planes de estudio hechas por la CONEAU se elaboran en consonancia con los intereses de las empresas privadas que operan en las regiones en las que se emplazan las universidades.
Son conocidos los casos en los que grandes multinacionales (como Repsol, Techint, Monsanto) asesoran a los departamentos de distintas carreras en las reformas necesarias para la “actualización” de los planes de estudio, violando de esta manera la autonomía universitaria.


El Kircnerismo no solo siguió implementado esta ley privatista sino que también en 2006 sancionó las Leyes de Educación Nacional y de Financiamiento Educativo (LEN – LFE) y avanza aun más en esa lógica. El vínculo de la educación con los intereses del capital privado se hace más estrecho al hablar de porcentajes del PIB para financiar el sistema. Se reafirma la necesidad de que la universidad se financie con “servicios a terceros”. Y se profundiza la utilización de los estudiantes como mano de obra barata o gratuita en la producción a través de los sistemas de pasantías.
Su aplicación ha tenido mucha resistencia en los primeros años, con el caso emblemático del rechazo del Consejo Superior de la UBA. Sin embargo, a partir de distintas maniobras políticas, han podido avanzar en la aplicación de algunas políticas.

Actualmente las universidades públicas más grandes utilizan más del 90% de sus recursos para pagar salarios. El resto de las partidas son giradas por el Ministerio del Interior o el Ministerio de Educación, pero para objetivos específicos y consensuados con estos ministerios.
La otra vía de financiamiento es la actividad privada, lo que deviene en que las carreras desarrollan investigaciones solo con el fin de obtener dinero, y las universidades aceptan partidas presupuestarias de empresas mineras como La Alumbrera y otras multinacionales a cambio de su injerencia dentro de la universidad.
Por la vía de las partidas presupuestarias extraordinarias o la actividad privada, se lesiona y ataca nuevamente la autonomía y autarquía universitaria.
El arancelamiento de trámites, del ingreso, de la posibilidad de rendir materias libres o cursarlas en verano también son formas de autofinanciamiento que utilizan las universidades, otro medio es la creación de actividades de extensión universitaria que nada tienen que ver con la producción de conocimiento o el desarrollo de la sociedad, como ocurre, por ejemplo, en la Universidad Nacional de La Matanza (UNLaM) que ofrece cursos de equitación a $250 la clase semanal.
Por otra parte, al descentralizar el sistema, se han creado un sin número de universidades “nacionales” que en los hechos son regionales. Estas universidades, al ser hijas de las nuevas leyes educativas, son montadas a imagen y semejanza del plan educativo del gobierno. Le “pelean” la matrícula y el presupuesto a las universidades clásicas. Ofrecen carreras y especializaciones con planes de estudio de bajo nivel teórico en muchos casos, o de exclusividad absoluta de la mano de altos aranceles. En su diseño, se estila la utilización de “departamentos” en lugar de las clásicas facultades, de esta manera se hace más borroso el lugar de los órganos colegiados del gobierno universitario. A la vez que atraviesan procesos “normalizadores” llenos de irregularidades, en donde el Rector es la autoridad suprema y se gobierna por decreto. A su vez existen fuertes conexiones entre estas universidades y las intendencias y gobernaciones en donde estas universidades funcionan, utilizando a estas últimas como una caja para hacer negociados o una chapa para legitimarlos.

A nivel del ingreso, aunque no existe aún un sistema nacional de restricción al acceso como en otros países se han implementado distintas herramientas para filtrar el libre acceso a la educación superior. Es conocido el caso del CBC de la UBA, que actúa como filtro encubierto disminuyendo la matrícula de las facultades. Pero esta política es desigual según la universidad en la que nos situemos. Existen ingresos directos, cursos nivelatorios, exámenes de ingreso, o apertura de carreras por ciclo (se abre la carrera para una promoción con cupo y luego se cierra). No se ha logrado amalgamar las situaciones del conjunto de las universidades, aunque podemos identificar que la política más utilizada es la de eliminación por “nivelación” (como en la UBA).
Además, el Gobierno recorta directamente presupuesto destinado a la educación, sólo éste año 2013, se eliminaron más de 23 mil becas, y no garantiza aspectos básicos como un “boleto” de transporte educativo, guarderías y comedores que permitan el acceso y el mantenimiento en el sistema educativo.
Así el ahogo presupuestario, la privatización, las restricciones al ingreso y a las posibilidades de continuar los estudios, se vuelven las variables determinantes de la educación superior y esto se ve reflejado directamente en la realidad, el 58% de los estudiantes universitarios abandonan la carrera en el primer año y de los que siguen, un 20% nunca la termina. Desde 1992 a la fecha el porcentaje de estudiantes que viene de la escuela pública bajó de un 54% a un 39% en la actualidad.

Peleas contra la LES y organización estudiantil


El movimiento estudiantil argentino sigue teniendo planteado ocupar el lugar protagónico que conquistó en la histórica Reforma Universitaria del 18, siendo uno de los estudiantados latinoamericanos con más tradición de lucha. A mitad del siglo XX, supo unirse con el movimiento obrero organizado, protagonizando jornadas como las del Cordobazo.
En las últimas décadas, protagonizó duras luchas. En el 95 peleó para evitar la sanción de la LES; fue una gran batalla, pero fallida. Luego, el estudiantado estuvo a la vanguardia de la pelea contra el recorte presupuestario de Menem en el 99’ y el intento de arancelamiento de López Murphy, durante el gobierno de la Alianza.
En la década kirchnerista, existieron distintos picos de movilización que desembocaron en los tres encuentros contra la LES desarrollados entre 2004 y 2006. Sin embargo, no se ha podido evitar la sanción de la nueva LEN, sucesora de la Ley Federal de Educación menemista. Sin embargo, el gobierno no ha podido avanzar con una nueva ley de educación superior. El año pasado, la movilización de los secundarios porteños empalmó con los reclamos sentidos de un conjunto de facultades en Capital Federal y otros puntos del país, pero el proceso se desactivó, obteniendo algunas conquistas parciales.

A nivel de la organización del movimiento estudiantil, es urgente avanzar en construir una corriente que dispute la dirección de los centros y federaciones estudiantiles. Denunciando el carácter entreguista de la dirección radical de la FUA y el intento de las distintas expresiones del peronismo de recuperarla para convertirla en una colateral del Ministerio de Educación. Combatiendo las políticas sectarias y vanguardistas de sectores de la izquierda que dirigen algunas importantes federaciones regionales y orientan los procesos de lucha a un callejón sin salida, privilegiando la construcción de la propia organización antes que el fortalecimiento del proceso de movilización.
Nuestro programa debe ser internacionalista, en la medida que entendemos el ataque a la educación como un plan contintental y mundial.
Queremos construir un movimiento estudiantil clasista, que defienda el derecho de los trabajadores a acceder a la educación. Entendemos la alianza obrero estudiantil como estratégica. Sabemos que la tarea de la defensa de la educación pública debe ser llevada adelante por el conjunto de los trabajadores y el pueblo. Apoyamos las luchas obreras y populares. En ese sentido, al interior de las universidades, somos profundamente solidarios con las luchas del claustro docente y no docente, por reivindicaciones económicas y políticas, y nos solidarizamos con los procesos de organización que se desarrollan en oposición a la burocracia y al gobierno.
Queremos un movimiento estudiantil opositor a los planes del gobierno y del imperialismo. Contra sus leyes educativas, sus políticas de ajuste y el ahogo presupuestario.
En nuestras universidades, defendemos la autonomía y la autarquía. Defendemos la libertad de cátedra y de conciencia, y las libertades científica y artística.
Estamos por el ingreso irrestricto, peleamos por garantías para la permanencia en las universidades y el egreso de ellas.
Al interior del movimiento estudiantil, defendemos los métodos democráticos y la lucha como salida para encarar y resolver los problemas de la educación publica.

En síntesis:
¡Defendamos el DERECHO a una educación pública, gratuita, por el desarrollo científico y artístico al que todos podamos acceder!

  1. ¡No a la Reforma Educativa! ¡Abajo los planes privatistas del Banco Mundial! ¡La educación es un derecho, no una mercancía!
  2. ¡Por Universidades Públicas que respondan a los intereses del pueblo y los trabajadores, no de las transnacionales!
  3. Contra la Reforma Educativa en las Universidades: ¡Fuera la LES! No a la CONEAU, ¡sí a la autonomía universitaria!
  4. ¡Por una educación pública con 100% financiamiento estatal! ¡No al arancelamiento de las Universidades Públicas!
  5. ¡Ningún subsidio a la educación privada!
  6. Que el Estado garantice nuestro derecho de acceder a la Educación Pública: ¡Por un sistema de becas que garantice la permanencia en las aulas! ¡Por comedores y jardines maternales gratuitos!
  7. ¡Por mejores condiciones de estudio: aulas, horarios, materiales, obra social!
  8. ¡Por el acceso irrestricto a las Universidades públicas! ¡No a los filtros de ingreso!
  9. ¡Democratización de los órganos de cogobierno! ¡Por mayoría estudiantil en las instancias de decisión de la universidad!
  10. Que no nos cobren la crisis a nosotros: ¡No al pago de la deuda externa! ¡Por más presupuesto para la educación pública, gratuita y de calidad!
  11. ¡Por la unidad obrero estudiantil para defender la educación pública!
  12. ¡Por un movimiento estudiantil democrático y combativo que enfrente las políticas imperialistas del gobierno de Cristina!

1 En Europa se lleva a cabo también una reforma universitaria que se denominó Plan Bolonia y fue iniciada a finales de la década del ’90.

lunes, 19 de agosto de 2013

 LA REFORMA EDUCATIVA COMO INSTRUMENTO DE SAQUEO DEL CONOCIMIENTO


Como un inicio de elaboración, y como disparador, producimos este material. El objetivo es que sea analizado de modo crítico, para la polémica, la incorporación de de otros ejes, y toda forma de colaboración.

Ya pasaron más de 30 años que el Banco Mundial empezó a hablar de educación, y desde entonces, rigurosamente, y con insistencia los economistas del neoliberalismo empezaron a meter mano en la organización, en la didáctica y en los contenidos de todos los niveles de formación. Por eso en todo el mundo, con mayor o menor éxito se dio la misma receta que aquí conocemos con el nombre de Reforma Educativa.
El imperialismo consideró que era necesaria una profunda transformación de la educación pública acorde con la nueva distribución internacional del trabajo, a la desocupación estructural, a las maquilas1… Educar, instruir, dejaron de ser los tópicos principales de la escuela y apareció el verbo contener. Refundan la escuela burguesa tradicional y la convierten en otra cosa.
Las universidades públicas se vuelven cada vez más elitistas, son privatizadas paulatinamente, los planes de estudios modificados según los intereses de las empresas multinacionales y la producción de conocimiento puesta al servicio del lucro privado y no de desarrollo del país.
La crisis educativa en la Argentina es un problema que rebasa las fronteras del país y que es casi un calco de las políticas que recorren el mundo.
Las movilizaciones y huelgas estudiantiles y docentes en Latinoamérica y en el mundo, sobre todo en Chile, Canadá, España se enmarcan en una pelea global contra el saqueo y la recolonización. Ya a fines de los 80, las empresas imperialistas empezaron a cuestionar el modelo educativo vigente hasta entonces y el Banco Mundial, junto con fundaciones satélites, como el Programa de Promoción de la Reforma Educativa en América Latina y el Caribe (PREAL), que financiada por empresas imperialistas difunde y fundamenta la necesidad de la reforma, empieza a tomar la educación como un hecho que hace a lo más medular y profundo de la política económica.

La Reforma Educativa no es solo una política de los gobiernos neoliberales tipo Menem que asolaron Latinoamérica y el mundo en la década del 90. Es una política aplicada por todos los gobiernos y partidos políticos patronales.
La Reforma Educativa se sigue manteniendo y aplicando por los gobiernos populistas y auto referenciales como antineoliberales como Lula, Dilma, Kirchner y Bachelet. Aquí la levantan desde Cristina a Macri.
El problema de la educación no es privativo del neoliberalismo, es esencial para el régimen capitalista de conjunto. Así como los gobiernos que dicen oponerse al neoliberalismo no tienen alternativas de fondo en lo económico, no la tienen en educación.


Las transformaciones centrales en la educación resultado de las políticas del banco mundial



  1. Sistema Educativo Nacional.
Desde la dictadura, se viene produciendo la descentralización del sistema educativo.
La provincialización de la educación es solo un paso táctico para el imperialismo. El objetivo es municipalizar el sistema educativo como ocurre en Chile, descentralizar absolutamente el presupuesto y junto con esto tender a la privatización de las escuelas rentables y hacer grandes negocios con los subsidios a la enseñanza.
Entregar escuelas a cooperativas, a empresas privadas o a los padres es también una de las formas que utiliza el Estado para desentenderse de su obligación con respecto a la educación. Parte esencial de esta política es la cooptación de las organizaciones que trabajan y organizan barrios dejándoles hacer escuelas populares, que terminan siendo escuelas para pobres con rostro “progresista”, donde se transmite el viejo anhelo de que la escuela predetermina la ubicación social de los niños. El proyecto madres cuidadoras y la proliferación de jardines de infantes organizados por los punteros en el Gran Buenos Aires es un reflejo de esta política.
La descentralización del presupuesto por escuela liquida las conquistas sociales, el ingreso a la docencia por listado de mérito, así como los ascensos.
El Estatuto desaparece.
La Ciudad de Buenos Aires es hoy el mascarón de proa de esta política. La evaluación docente centralizada y el “Maestro de los maestros”, el docente de mayor calificación, con sueldo diferenciado, como responsable de la marcha de la enseñanza, cambia el rol del director, lo quita de la carrera docente y lo coloca como gestionador y disciplinador de la escuela. Esto abre la puerta para su futura conversión en lo que en la escuela privada es el responsable patronal. En un futuro, podrá gestionar proyectos y financiamiento con empresas, tal como lo determina la ley de educación.
Para imponer esta política necesita redefinir el rol docente y el ingreso y los ascensos. La lucha de los docentes de Capital en defensa de las juntas de calificación es una pelea no sólo contra el acomodo, es también una pelea contra la necesidad del gobierno de imponer un rol docente disciplinado y precarizado que dócilmente cumpla con el cometido de aplicar acríticamente las directivas y los dictados del Banco Mundial.
El Ministerio de Educación, que no tiene ninguna escuela ni es responsable de presupuestos, porque son provinciales, es el encargado de centralizar a través de la Ley los contenidos y el carácter de la escuela.

  1. La escuela para contener y al servicio de las empresas
La vieja escuela, donde se formaba mano de obra a través de la lectoescritura y el cálculo, que con su organización y contenidos de historia y geografía orientaba hacia las necesidades ideológicas de la burguesía, deviene en escuela donde educar se transforma en contener, conocimientos en saberes y se prepara a miles de niños para la desocupación y el trabajo precario.
Las escuelas técnicas (Ley de Educación Técnico- Profesional) se convierten en formadoras de obreros de producción y no de técnicos.
Las pasantías sin dedicación por parte de la patronal son generadoras de mano de obra que tira para abajo el salario. Las 400.000 pasantías que propicia el Ministerio de Educación de la Nación, no solo alejan a los jóvenes del conocimiento científico para convertirlo en disciplinamiento laboral en las empresas, sin ninguna responsabilidad formativa, sino que también subsidian a la patronal con 40.000.000 de horas gratis. Y es un brutal disparador de desocupación.

  1. La falacia de educar para el trabajo
Miles de adolescentes y jóvenes trabajan en forma precaria. También en la administración pública.
La educación para el trabajo es una falacia que quita conocimientos e impide la posesión de estrategias científicas y generales.
Se propician escuelas de organizaciones sociales.
Prácticas del Lenguaje en vez de Lengua, Matemática Práctica en vez de Matemática, Ciencias Sociales en vez de Historia y Geografía. Predetermina la condición social de los alumnos y veda el ingreso a la universidad, destino de egresados de algunas escuelas privadas o de elite.
Las escuelas de Arte desaparecen y se convierten en profesorados. Se estimula el Arte como mercancía, no como logro de la creación humana. El acceso a la formación artística también pasa a ser para una elite.

  1. La universidad pierde su carácter de generador de ciencia al servicio del país
La investigación está subordinada a las necesidades del imperialismo. En la Facultad de Ciencias Sociales de la UBA, con cientos de becas y subsidios, investigan sobre conflictividad o movimientos sociales.
Los estudios en biología, medicina, etc. están al servicio de la adaptación técnica de necesidades de las empresas a precio vil.
La explosión de un laboratorio en la Universidad Nacional de Río Cuarto es el ejemplo máximo de esto. En 2007 murieron 6 personas a causa de una explosión provocada en medio de una investigación realizada por la universidad en sociedad con una empresa privada, en la cual estaba involucrada la compañía Aceitera General Deheza. Esta tragedia fue consecuencia, de que no era una importante y seria investigación, sino una forma criminal e inhumana de adaptar técnicas para la obtención de aceite. Recursos, esfuerzos y vidas para optimizar un simple procedimiento. ¡Estos son los nuevos mártires de la ciencia!
La investigación en los países semicoloniales no tiene nada que ver con las necesidades propias. Las empresas y los gobiernos imperialistas usan la mano de obra barata de los científicos para satisfacer sus necesidades, apropiarse de las patentes y vender esos logros científicos al propio país de procedencia.
Por ejemplo, en el año 2008 el Consejo Directivo de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de la UBA resolvió la cesión y el uso exclusivo de un robot diseñado por el Laboratorio de Robótica del Departamento de Computación de esa facultad a la empresa privada Robots del Sur SA, hecho que produjo la movilización de la mayoría de los estudiantes en contra de esta clara muestra de saqueo del conocimiento, donde se logro revertir la resolución producto de la lucha estudiantil.
En esa misma facultad en el año 2010, con la movilización estudiantil, se logró frenar la acreditación de las carreras por la Comisión Nacional de Evaluación y Acreditación Universitaria (CoNEAU), evitando así que se modifiquen los planes de estudio en pos de los intereses de las empresas privadas que pretendían que las investigaciones de dicha facultad se orienten según las necesidades del mercado.
En las universidades nuevas, del Conurbano Bonaerense, otra forma de poner la educación superior al servicio de las empresas es crear carreras técnicas, donde no se promueve el pensamiento crítico ni la producción de conocimiento sino la ejecución de técnicas para la producción. La Universidad Nacional de La Matanza (UNLaM) cuenta, por ejemplo, con tecnicaturas especializadas en la industria del calzado entre otras.

  1. El imperialismo saquea el conocimiento
Decenas de descubrimientos salen año a año de los países pobres: medicinas, alimentos, plantas de uso industrial, cultivadas y mejoradas por siglos por comunidades originarias, son simplemente capturadas, mejoradas y vueltas a vender.
Los chinos son, a través de cientos de años, los creadores de la soja tal cual es ahora, los peruanos y los mexicanos del maíz. El imperialismo, las empresas de biotecnología, se apropian de ese conocimiento secular y con un cambio de uno o dos genes, los patentan y vuelven a vender a sus inventores.
El hospital público también tiene a sus pacientes como carne de cañón de vacunas, remedios y técnicas que después de años de ensayo (causa de muertes, discapacidades, etc.) salen como remedios que van a ser vendidos a los ricos.
¡Qué barata resulta así la investigación! También, en aras de la investigación, nos saquean la salud.

  1. La vuelta de tuerca de la Reforma Educativa son los terciarios y profesorados.
Magnifican la didáctica y minimizan los conocimientos. En los planes de estudio se priorizan únicamente las materias pedagógicas en detrimento de la formación específica de cada área. De esta forma, se desarma intelectualmente a los jóvenes profesores para educar e intentan nutrirlos de una ideología acorde con los dictados del Banco Mundial.

  1. El conocimiento agrega valor
Funciona como una mercancía, por lo que no es ajeno al saqueo.
La formación de científicos está ligada a las posibilidades de un país independiente.
Hoy en la Argentina, los Institutos de Investigación han sido destruidos, privatizados o puestos al servicio de las necesidades del imperialismo.
Las investigaciones en semillas son casi monopolio de Monsanto, aumentando la dependencia.
El Estado es el único que puede garantizar una verdadera investigación de los problemas sociales en nuestros países. La investigación estatal debe estar al servicio de la soberanía alimentaria, de las nuevas matrices energéticas y de los problemas sanitarios nacionales. No a la experimentación de campo de proyectos de investigación del imperialismo.

  1. El sistema educativo único y nacional.
La educación debe ser gratuita, científica, laica, obligatoria y monopolizada por el Estado.
Desde los jardines maternales hasta la universidad.
Desde su inicio debe tener estrategias y escalonamientos para llegar al conocimiento científico, la didáctica debe estar alineada en este sentido, tiene que estar íntimamente relacionada con la ciencia. Hay que rechazar la didáctica que se adapta a enseñar lo que la patronal y el gobierno determina que deben saber los pobres.

  1. Presupuesto de Educación. Salario.
El presupuesto educativo debe ser nacional, acorde a las necesidades y garantizado con: el no pago de la deuda externa; impuestos a las grandes fortunas, a las ganancias de las multinacionales y grandes empresas y a las inversiones financieras; investigación y quite de subsidios sin aumento de tarifas a las empresas privatizadas; reducción del presupuesto de las FFAA y de seguridad; supresión de subsidios a la Iglesia Católica y demás iglesias y a toda escuela privada; rescindir los convenios entre el estado y escuelas privadas – como las conveniadas o tipo voucher; las escuelas privadas que no puedan sostener y hagan peligrar el empleo de los docentes ingresarán sin indemnización a la enseñanza estatal, con reconocimiento de antigüedad y orden de mérito del personal no jerárquico.
Necesitamos aumentar salarios y jubilaciones, recuperar el salario básico y que sea equivalente a la canasta familiar básica e indexado según la inflación.
Salario mínimo por cada estudiante para garantizar el acceso a la educación.

  1. La lucha es internacional
La crisis mundial acelera los tiempos del gobierno para la aplicación de la segunda reforma del estado y la liquidación de los derechos en materia de educación. No hay ajuste sino se mete mano a salud y educación. La liquidación del Estatuto en la “vidriera” de Capital Federal no es un hecho aislado o una política de Macri. Es un paso, es una vuelta de tuerca para imponer el modelo chileno, la más clara expresión en América Latina de lo que es la Reforma Educativa.
La educación es un problema igual en toda Latinoamérica, representado por el saqueo científico y de la investigación, que se ponen al servicio de la explotación y la recolonización de nuestros países. Por eso, en toda Latinoamérica la resistencia docente - estudiantil es contra las leyes educativas que dan marco a las reformas, por la reivindicación de una educación pública gratuita de calidad y contra la flexibilización laboral de los docentes.

Por eso proponemos:
  • Institucionalizar la relación entre los docentes, demás trabajadores de la educación y estudiantes.
  • Intercambiar información sobre las luchas, los avances y retrocesos en la aplicación de las políticas colonizadoras y formar una red de solidaridad latinoamericana de apoyo a todas las luchas.
  • El problema de la educación es un problema de todos los trabajadores, por lo que EL VIRAJE! debe llevar dentro de sus objetivos y programa, la lucha por la educación al servicio de la clase trabajadora y para que las organizaciones obreras tomen el problema educativo dentro de su programa reivindicativo.


    Notas:

1 Se denomina maquila a una fábrica que sitúan las empresas multinacionales en países empobrecidos, donde los trabajadores, generalmente mujeres, trabajan en condiciones de salarios de hambre.

lunes, 5 de agosto de 2013


Elecciones 2013:LOS JÓVENES TENEMOS QUE HACERNOS OÍR

Por Ignacio Lavalle, Candidato a Diputado Nacional por Bs. As. - PSTU en el Frente de Izquierda y los Trabajadores

Cuál es la situación de los jóvenes trabajadores en Argentina? Y cuáles son nuestras perspectivas?Tenemos alguna posible salida...?SÍ: HACERNOS OÍR.Hay una alternativa para los jóvenes estas elecciones: el Frente de Izquierda y los Trabajadores.Ignacio Lavalle, candidato a Diputado Nacional por Bs. As., nos explica por qué.



¿Sabías que según la Organización Internacional del Trabajo dos tercios de los jóvenes en edad laboral estamos desempleados o con trabajo precario en los países en vías de desarrollo?1 ¿O que el desempleo en jóvenes de entre 18 y 25 años en nuestro país está cerca del 20%? ¿Y que el 60% de los jóvenes tiene problemas de empleo porque no lo consigue, porque no puede trabajar más horas o porque trabaja en condiciones precarias?

Actualmente, como jóvenes estamos en una situación crítica: desempleo, inconvenientes para acceder a una educación de calidad, trabajos precarios, etc. Es bien sabido por todos nosotros lo que cuesta llegar a nuestro primer trabajo. Después del interminable período de selección, muchas veces impago, si tuvimos suerte entramos a un trabajo en el que laburamos con un ritmo esclavo y que a fi n de mes nos sirve para comprar apenas los apuntes para la facultad.

Hoy en día, los jóvenes que estamos estudiando o en busca de nuestro primer empleo obtenemos trabajos, por lo general, en negocios de comida rápida o en los conocidos call centers. El fenómeno de los call centers tuvo un gran crecimiento en los últimos diez años, sobre todo porque ha crecido la rama de los servicios y Argentina se ha ubicado como una suerte de “paraíso laboral” para las multinacionales que buscan dónde gastar menos, debido a los contratos de trabajo precario, flexibilización laboral y bajos salarios.
Así es como aproximadamente 60.000 somos empleados de estas multinacionales, pero tercerizados. Por lo general, somos contratados por agencias de tercerización. Una agencia nos hace la entrevista, para trabajar para otra agencia que le brinda a su vez, el servicio a una multinacional, como Telefónica, Hp, Sprayette, entre otras. Teletech, Atento, Activo, son algunas de estas empresas que brindan este tipo de servicio y que llenan el primer punto de nuestra experiencia laboral en nuestro CV, como Mc Donald’s, Mostaza o Burger King, donde además sufrimos los males del horario rotativo. En este tipo de trabajos un 70% de los trabajadores son mujeres, muchas veces jefas de familia o madres solteras que buscan sostener, lamentablemente con míseros sueldos, la situación familiar.

Ministros de economía, funcionarios, gobernadores, bajo este gobierno kirchnerista se jactan de que los call centers nos brindan la posibilidad de trabajar mientras continuamos nuestros estudios o de mantener una familia sin ser trabajadores calificados. Sin embargo, lo que no dicen es que es un trabajo insalubre, altamente precario, en donde en 2 minutos tenemos que recibir quejas o pedidos, escuchar al cliente y resolver sus problemas. Luego, recibimos o emitimos más llamadas, o en el caso de negocios de comida rápida, atendemos más clientes, cocinamos y despachamos pedidos; para luego contar con 20 o 30 minutos de break. Y ni hablar de cuando nos tienen trabajando en negro, hasta que ellos “están seguros” de que no te vas a ir.
Pero además de esto, en muchos de estos trabajos no contamos con el convenio que nos corresponde. Por ejemplo, en los call centers deberíamos contar con el convenio de los trabajadores telefónicos o de los bancarios, en el caso de que prestemos atención financiera, pero a pesar de ellos, en su mayoría trabajamos como empleados de comercio, ya que este es uno de los contratos más precarios del sistema laboral. Según varios informes de consultoras privadas, en Argentina los jóvenes “ocupados, pero en empleos sin plenos derechos, integran el grupo mayor: son alrededor de 1,3 millones”(2); esto explica por qué muchos de nosotros no podemos contar con ninguna estabilidad: vivimos con el día a día, cambiamos de trabajo todos los años porque los contratos no se renuevan, porque las campañas se cierran, o porque la empresa se va a otras provincias o países en donde los contratos son aún peores.


Los jóvenes y las elecciones 

En estas elecciones votaremos más jóvenes que en todas las anteriores porque por primera vez se incorpora la franja entre 16 y 18 años. Pero al buscar a quién dar nuestro voto, nos encontramos con que las variantes patronales, sean kirchneristas o de oposición, reformistas o de centro izquierda, no tienen una propuesta para que los jóvenes vivamos mejor. El gobierno se jacta de haber otorgado netbooks a los chicos sin garantizar el acceso a las escuelas y Massa tiene en sus propias listas a De Mendiguren, ex titular de la UIA (Unión industrial Argentina, cabeza de las grandes empresas) y a Daer, quien garantiza que el sindicato de sanidad no luche en contra del impuesto a las ganancias y las asignaciones familiares universales.

Mientras nos llenan con spots televisivos vacíos de contenido, los jóvenes nos levantamos todos los días enfrentando un futuro sin ninguna perspectiva. Pero de ninguna manera los jóvenes podemos mostrarnos indiferentes ante las elecciones. Tenemos que saber aprovechar ese espacio para hacernos escuchar, llevar nuestros reclamos y propuestas también al terreno electoral. No podemos confiar en que los candidatos de las patronales y la burocracia, responsables de lo que sufrimos todos los días, hablen por nosotros.
Con ese objetivo junto con otros compañeros del PSTU, integro las listas del FIT como candidato a diputado nacional.

Pero tampoco es fácil para los jóvenes y los trabajadores participar de las elecciones. Nos ponen todo tipo de trabas, nos exigen varias miles de afiliaciones para otorgarnos la legalidad política, por eso nos verás todos los fines de semana pidiéndote que nos ayudes con tu firma. Por supuesto que los partidos grandes nunca hicieron eso, ellos lo arreglan con plata.
Pero aún si con mucho esfuerzo militante se consiguen esas afiliaciones, eso no te garantiza que te puedas presentar a elecciones.
Desde el 2011 pusieron otra traba, las PASO, para eliminar a los partidos más chicos y con menos recursos, en especial a los que defienden los intereses de la clase obrera. La nueva ley dice que el partido o frente que no obtenga, en las PASO, el 1,5% de todo el padrón electoral, no se puede presentar a las elecciones de octubre.

Por eso es que a la par de invitarte a seguir luchando juntos por todos nuestros derechos y por una nueva sociedad sin explotados ni explotadores, te pedimos que el 11 de agosto votes al FIT, para que este Frente, que no tiene ninguna relación con la patronal ni con el Gobierno, pueda presentarse en Octubre y los jóvenes estudiantes y trabajadores tengamos una herramienta para hacer oír nuestra voz.

Notas: 1 Trabajo informal, mal remunerado o desempleo: la realidad de la mayoría de los jóvenes en los países en desarrollo. En http://www.ilo.org/global/ about-the-ilo/newsroom/news/WCMS_212956/ lang--es/index.htm 2 Generación “ni-ni”: un 15% de los jóvenes argentinos no estudia ni trabaja. En: http://www.iprofesional.
com/notas/162418-Generacin-ni-ni-un-15- de-los-jóvenes-argentinos-no-estudia-ni-trabaja

Nuestras propuestas centrales

> Fuera la LES y todas las leyes educativas privatizadoras.
> Aumento del presupuesto educativo.
> Becas iguales al salario mínimo.
> Boleto educativo para todos los medios de transporte, comedores estatales en todos los establecimientos educativos.
> Por el derecho a todas las jóvenes a elegir el momento de la maternidad. Guardería en todos los centros laborales y educativos. Derecho al aborto legal, seguro y gratuito.
> Pase a planta permanente de todos los trabajadores tercerizados y por agencia.
> Salario igual a la canasta familiar.
> No al impuesto al salario y a los topes en las asignaciones familiares.
> No pago de la deuda externa.
> Reestatización de las empresas privatizadas y de todos los recursos naturales.
> Expropiación y estatización de la banca y de las grandes empresas bajo control de los trabajadores.
> Unidad obrero-estudiantil.
> Por un gobierno de los trabajadores que inicie la construcción del socialismo.



http://www.pstu.com.ar/index.php/juventud/85-cjuventudpestana/603-los-jovenes-tenemos-que-hacernos-oir